domingo, 7 de junio de 2009

Desvelos, anhelos



Me aferro a la idea de no sentir desconsuelo,
de inmortalizar todos los buenos momentos vividos,
a profanar mi dolor con los recuerdos de tus latidos,
a rescatar de mi alma secretos de porqué te quiero.

Cada espacio que se queda en mi deshielo
es un vacío en lo más hondo de mi pecho,
es un hundirme en el centro de este lecho,
no hallar refugio en los labios que hoy anhelo.

Yo no tengo miedo de afrontar mi retiro,
he aprendido a revivir con un suspiro;
me estremece pensar que tras el aguacero,
el sol no vuelva a iluminar nuestro sendero.

Y aquí estoy, sacando tus cosas de mi armario,
guardando fragmentos de mi ilusión en tu equipaje,
por si podemos evitar este duelo tan necesario,
por si aún consiguiéramos retomar este viaje.

13/05/09

No hay comentarios:

Publicar un comentario